La pared seca es un muro de doble cara que se construye con piedras encajadas entre sí sin usar ningún tipo de cemento o mortero.
En nuestras islas las paredes surgen de la necesidad de adecuar el terreno para cultivo a la vez que se delimitaban las propiedades o se hacían parcelas para el ganado.
Las paredes usan la piedra del entorno, del mismo terreno, y es por ello que la variedad de tipos de pared y acabados es extensa
La experiencia en restauraciones de pared seca de todo tipo garantiza un trabajo de categoría y nos permite ofrecer un amplio abanico de posibilidades a la hora de crear proyectos nuevos.